Carmencita Calavera

Carmencita Calavera surge en Granada, arropada por La Banda del Pantano, en la escena musical pisando fuerte en 2014. Apostando fuerte desde el principio, la formación de la banda se alimenta de músicos de larga trayectoria y gran experiencia en el panorama musical local que hacen que el conjunto de los temas sea de calidad. El primer EP de Carmencita Calavera fue grabado en la sede de Plutón Studios, de la mano de Carlos Dingo, con gran aceptación, ya que desarrolla un directo muy interesante tanto para crítica como para público, cierra su formación y se hace un hueco en la apretada agenda granadina. La banda granadina se viste de largo ya en marzo de 2017 para publicar su primer LP, en formato vinilo + descarga digital, con Wild Punk Records. El disco, con título homónimo, supone la consolidación de un grupo que marca carácter y actitud y se abre paso en la escena nacional mirando hacia horizontes más amplios. Este LP, una auténtica edición en vinilo a la antigua usanza, contiene doce temas de corte ecléctico, que van desde el rock fronterizo hasta la copla, pasando por el surf, sin dejar nunca de lado una marcada tendencia punk rock que empasta con las armonías más cálidas de la voz de Carmen, versátil y completa frontwoman que dirige a los suyos en torno a sus composiciones. Sus letras, temáticas que parecen salidas de películas de serie B, personajes extraordinarios o crítica social desde un tono desenfadado, hilarante, irónico a veces, son algunos de los ingredientes que cuece a fuego lento esta banda tildada de “bizarra” por la crítica musical. La solista, acompañada de Jacobo García a la batería (Los Portazos), Luigi Ramos a la guitarra e Ignacio García al bajo (miembros en el pasado junto con Carmen de La Barca de Sua), se ve reforzada en este primer disco de presentación con la co-producción de David Sutil. Las colaboraciones tampoco se quedan atrás con músicos como Antonio Arias y Juan Codorniú (Lagartija Nick), Jimi García (Eskorzo), J.J. Machuca y Alejandro Méndez (Lori Meyers) y Alberto Reyes (Los Térmicos). Casi nada. Carmencita Calavera se presentan en sociedad muy bien acompañados pero sin olvidarse de aquellas melodías sobre conductores de autobuses en una perdida y ya vieja maqueta que les hizo ser uno de los grupos más coreados y divertidos en sus directos. También en 2017 aparece su primer videoclip, de la mano del director Emilio Egea, que explota en el tema “Calavera” ese espacio más fronterizo, con una bella alegoría sobre la vida y la muerte. Carmencita Calavera se presentan en sociedad muy bien acompañados, pero sin olvidarse de aquellas melodías sobre conductores de autobuses en una perdida y ya vieja maqueta que les hizo ser uno de los grupos más coreados y divertidos en sus directos. “Un día en éxtasis” (Wild Punk, abril 2019) es el nombre del segundo trabajo de la banda granadina grabado y producido por Jaime Beltrán (Pájaro Jack, Señor Chinarro, Los Planetas) en su estudio La Resinera. En esta ocasión, y de nuevo apostando por el vinilo como soporte físico, se trata de un EP de cinco temas que abre con sonidos basados en el punk o el rock, pero que rápidamente cambia a otros muy diferentes, que van desde espacios psicodélicos a otros fronterizos o más pop, sin perder esas temáticas de película de serie B en las letras, tan del gusto de la banda. Historias oscuras, tenebrosas a veces, intrigantes en todo caso, que van desde las profecías llegadas de otros planetas a desamores ahogados en alcohol, viajes paranoicos y encuentros en lugares insospechados que despertarán la imaginación de sus seguidores. Con una estética que se acerca al misticismo entendido de una forma personalísima, uniendo el mundo de las drogas y de los santos, este “día en éxtasis” promete sustituir la maldición del pantano de su primer trabajo por un camino espiritual que no habrá que tomarse demasiado en serio. Con la ayuda de Toni Jiménez (Madame Popova, Unidad y Armonía, Nievla) a los teclados y sintetizadores, que cobran relevancia en este trabajo, así como la aportación de Antonio Reyes al órgano litúrgico (lo del misticismo no es por decir), logran sumirse en esas nuevas sonoridades que, no obstante, no dejan de hacer reconocible el sonido que la banda ya hiciera propio en su primer trabajo homónimo. Cinco puñaladas sonoras que Carmencita Calavera condensa en un EP de 12” a 45 r.p.m., publicado de nuevo por el sello Wild Punk, un viaje musical que promete una segunda parte en un tiempo no muy lejano. La experiencia adquirida por salas, festivales de mediano y gran formato (Bull Festival, Rock Zaidín, Gigante...), la incorporación de alguno de sus temas en series internacionales (Tales of Arcadia: 3 Below, de Dreamworks Universal) o sus llenos en salas locales hacen prever una intensa actividad a este grupo que destaca en el bullente panorama granadino, que aporta color y fuerza a su directo, así como estilo y madurez en sus grabaciones. Actualmente se encuentran girando su último trabajo, "Una noche en el desierto", publicado en febrero de 2023, con la novedad de Rafael Navajas a la batería con respecto a la formación original. Además les suelen acompañar Wilma Lorenzo al teclado y sintetizador y Migue Robles a la trompeta. Este nuevo LP supone la continuación y extensión de “Un día en éxtasis”, EP publicado en 2019. Son un puñado de canciones dispares entre sí que beben de distintas fuentes, siguiendo con la línea de la banda. A pesar de los diferentes estilos que enfrentan este conjunto de temas, siguen una idea común narrativa basada en la extrañeza de sus historias, con un trasfondo oscuro a veces, otras irónico, rozando lo surrealista por momentos. Si hubiera que buscar un hilo conductor en este tercer trabajo de Carmencita Calavera podríamos decir que es la búsqueda de una “anti épica” o “contra épica”, que se repite en canciones como “Horizonte de Sucesos”, “El Resplandor”, “La Furia” o “Salsipuedes”. Con una base rock inconfundible, el grupo transita por otros estilos que pueden ir desde el postpunk de “EEUU del Caos”, el pseudo narcocorrido de “Salsipuedes” o más cercanos a la psicodelia y sonidos disco de los años 70 y 80 en varios temas. Una gama de colores amplia para una banda que no deja de crecer. Como en otras ocasiones, la producción del disco corre a cargo de David Sutil y la propia banda, si bien Antonio López (Noni, de Lori Meyers) participa como productor en dos de los nuevos temas que se presentan. En esta ocasión el sello discográfico Praesepe Records es el que da cobertura a esta banda que consolida su estilo y lo hace tal vez más oscuro en las formas, pero igualmente irónico en el fondo de sus letras.